¿Podrá tener África un futuro digitalizado?
La Unión Africana, la organización internacional que reúne a 55 estados del continente, ha adoptado una estrategia muy ambiciosa para impedir que África quede atrás en la transición digital y así garantizar su desarrollo económico.
En este mes de febrero se cumple un año de la adopción de la Estrategía digital de la Unión Europea, un documento que en los últimos meses ha generado una gran cantidad de información adicional. Quizás debido a la pandemia, o quizás por eurocentrismo, ha pasado desapercibida la Estrategia digital de la Unión Africana, que comparte aniversario con la europea puesto que fue lanzada prácticamente de manera simultánea.
De hecho, ambas estrategias tienen en común una serie de hitos, como la transformación digital de la administración pública, las soluciones digitales relacionadas con la conectividad y el aprovechamiento de esta transformación para mejorar la educación y las capacidades de la población.
Pero hay también algunos retos que son más específicos del continente africano, como erradicar la pobreza para garantizar el desarrollo socioeconómico del continente, o asegurar la propiedad africana de las herramientas de gestión digital, entre otros. Se pretende, en definitiva, generar un crecimiento inclusivo, estimular la creación de empleo, y romper la brecha digital.
Cuestión de supervivencia
La doctora Amani Abou-Zeid es comisionada de Infraestructura y Energía de la Comisión de la Unión Africana (AUC) a cargo de los sectores que cubren Energía, Transporte, Turismo y TIC. En diversas manifestaciones públicas suele recordar que, a día de hoy, 300 millones de africanos viven a más de 50 kilómetros de una conexión de banda ancha.
A mediados de 2020 Amani Abou-Zeid, señaló en una conferencia sobre e-gobernanza celebrada en Estonia, que la transformación digital es una “cuestión de supervivencia para África” y que el debate no está ni el cuándo ni el porqué de dicha transformación, sino en la velocidad de su implementación.
En esta misma conferencia la comisionada de la Unión Africana señaló otros déficits actuales que se deben erradicar: “la falta de conexiones fiables la mayor parte del tiempo. ya que el suministro de energía tampoco lo es; la cobertura en las zonas rurales y en los países sin litoral, y la falta de habilidades digitales, especialmente entre las niñas y las mujeres”.
La Estrategia digital de la Unión Africana es un documento transcendente. Por una parte, fue adoptado en una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Addis Abeba; es decir, al más alto nivel. Y, por otra, la Unión Africana ha vinculado el éxito de la estrategia a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y a la Agenda 2063, un documento que marca el camino para consolidar la transformación del continente en la segunda mitad del siglo XXI.
Una de las primeras concreciones de la Estrategia digital de la Unión Africana ha sido la firma en 2020 de una convención sobre ciberseguridad y protección de datos.
Cerrando la brecha digital
La Estrategia digital de la Unión Africana pretende construir un mercado único digital seguro para 2030, en el que se garantice la libre circulación de personas, servicios y capital. Tanto las personas como las empresas deberán acceder sin problemas y participar en actividades en línea de conformidad con lo establecido en la Zona de Libre Comercio Continental de África (AfCFTA).
También está en la agenda de la estrategia la creación de un fondo de soberanía digital con el fin de cerrar la brecha de infraestructuras y lograr una banda ancha accesible, asequible y segura, independientemente de la demografía, el género, la geografía, u otros factores.
Igualmente, se incluye un programa masivo de desarrollo de habilidades digitales en línea para proporcionar conocimientos y habilidades básicos en seguridad y privacidad en el entorno digital a 100 millones de africanos al año para 2021 y a 300 millones al año para 2025
En el horizonte 2030, los africanos deberían poder acceder de forma segura a por lo menos 6 Mb/s dondequiera que vivan en el continente, a un precio asequible de no más de 1céntimo de dólar por Mb, y a través de un dispositivo inteligente que esté fabricado en el continente a un precio no superior a 100 dólares.
Hacia la transversalidad
La digitalización del continente africano busca desarrollar habilidades digitales inclusivas y estimular las capacidades humanas en todos los ámbitos de las TIC, incluida la codificación, la programación, el análisis, la seguridad, la cadena de bloques, el aprendizaje automático, la inteligencia artificial, la robótica, la ingeniería.
Con ello se pretende que el poder transformador de la transición digital llegue a la administración, a la justicia y otros sectores clave como la agricultura, la salud y la educación. La Estrategia recomienda que en las políticas orientadas a estos fines se adopten directrices comunes y estrategias armonizadas a nivel continental.
Estímulo para la economía
Otro objetivo clave de la Estrategia digital de la Unión Africana es armonizar políticas, legislaciones y regulaciones y establecer y mejorar redes para fortalecer el comercio, la intrainversión los flujos de capital y la integración socioeconómica del continente, manteniendo al mismo tiempo un equilibrio de relación con otros continentes en el contexto de las economías en red (economía digital, economía colaborativa).
Cabe citar también la importancia de fomentar las políticas que creen un entorno propicio para el comercio digital productivo y los sistemas de pago digitales con el fin de propiciar oportunidades para el trabajo digital, la competencia leal para las empresas digitales y contribuir a una posición ventajosa de África en la economía digital mundial. Asimismo, se promoverán estándares abiertos e interoperabilidad para el marco transfronterizo y en la protección de datos personales y la privacidad.
La gestión y el uso de los dominios de Internet de país es otro aspecto clave de la Estrategia digital de la Unión Africana, ya que se consideran ‘recursos nacionales críticos’. Al tiempo se asegurará que las operaciones técnicas y administrativas cumplan con los estándares internacionales para fomentar la confianza en el uso de los nombres de dominio africanos.
Digitalización, crecimiento y pandemia
La Estrategia digital de la Unión Africana destaca la correlación entre nivel de penetración y calidad de la banda ancha, por un lado, y crecimiento económico, por otro. Según un estudio del Banco Mundial, que la estrategia cita, se estima que por cada 10% de aumento de la penetración de la banda ancha en los países de ingresos bajos y medianos resulta en un aumento proporcional del 1,38% del PIB.
El despliegue de banda ancha –recuerda la estrategia– también se relaciona directamente con la creación de los puestos de trabajo creados para el despliegue de la infraestructura de banda ancha, e indirectamente con una mayor productividad y con nuevos productos y servicios. Según la Unión Africana actualmente internet llega a 473 millones de personas de una población total de más de 1.200 millones de habitantes.
La precariedad digital actual del continente se pone de manifestó de manera especial en estos momentos. Así lo ha puesto de relieve la doctora Amani Abou-Zeid: “al igual que el resto del mundo, África, está experimentando los impactos económicos más graves desde la Gran Depresión de la década de 1930 y la pandemia está revirtiendo el progreso logrado en los últimos años. Las medidas que se están tomando, como el control de la enfermedad, la información, los pagos o la prestación de servicios gubernamentales, dependen básicamente de plataformas y herramientas digitales”.