El vocal de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación (COIT), José Fernando García Ródenas nos cuenta más detalles sobre aquellas facetas donde la IA está impactando con más éxito, como en la aceleración de la investigación sobre la enfermedad o el pronóstico de su evolución.
Nadie duda a estas alturas de que la IA está en nuestras vidas desde hace tiempo. No en el concepto amplio y tal vez utópico de la sustitución al 100% de las capacidades del cerebro humano, pero sí en cuanto a ayudarnos en trabajos específicos, normalmente sustituyendo tareas sencillas, tediosas o repetitivas. Con el paso del tiempo, el abanico de actividades que incluyen la IA es cada vez más variado, con tareas que además son más complejas y con una mayor variabilidad en tipos y cantidad de datos utilizados.
Hablamos de la toma de decisiones empresariales estratégicas u operacionales, pero también de la investigación en cualquier campo, o de la actuación en temas tan dispares como atender a nuestros clientes en un esquema de 24 horas los 7 días de la semana, o de actuar con una precisión casi inimaginable en agricultura, minería, extracción petrolífera, fabricación de cualquier tipo de bienes… y también en sanidad, con una perspectiva clínica amplia y de bienestar social, donde la IA ayuda en diagnósticos, terapias y prevención, así como en la gestión del riesgo de contagio de pacientes infecciosos.
En el coronavirus, la IA está enfocándose en las siguientes áreas:
- Aceleración de la investigación: en la recuperación de información y estudios de investigación, simulación de procesos y ensayos clínicos que aminoren los tiempos
- Análisis, control y pronóstico de cómo evoluciona la pandemia con el fin de comprender qué ha pasado y porqué, evitar contagios o anticipar hechos
- Creación de nuevas estrategias, métodos y medicamentos
Con respecto a la aceleración de la investigación, IBM ha desarrollado un servicio de investigación de IA basado en la nube, que ha ingerido un corpus de miles de documentos sobre la COVID-19 y bases de datos de DrugBank, Clinicaltrials.gov y GenBank. Este servicio utiliza una IA avanzada que permite a los usuarios realizar consultas específicas y extraer el conocimiento crítico de la COVID-19 según el área de investigación.
De otro lado, se está utilizando la simulación como forma de hacer experimentos virtuales en física, química o biología, donde la complejísima interacción entre átomos obliga a utilizar supercomputadores con una enorme capacidad de cálculo muy específico para ver, por ejemplo, cómo interactúan las moléculas con el virus, lo cual requiere un nivel de cálculo extraordinario. Un ejemplo de esto es la COVID-19 High Performance Computing Consortium, que a día de hoy componen 33 miembros que tienen 27 proyectos activos con unas cifras de uso de hardware verdaderamente mareantes: 105.000 nodos, 3.8 M de cores, 418 petaflops y 41.000 GPUs.
En cuanto al análisis, control y pronóstico de la pandemia tenemos casos significativos, que además van a suponer un antes y un después en cuanto al tratamiento de datos personales (sin entrar en detalles de tipo ético o legal, que daría para muchos otros artículos y puntos de vista):
- Alerta temprana de la pandemia, BlueDot, un sistema basado en IA que analiza información en redes sociales. Fue capaz de alertar sobre el peligro de lo que estaba ocurriendo en la ciudad china de Wuhan. Una aproximación semejante de uso de la IA la utiliza Metabiota.
- Apps para control de movimiento de personas, con diferentes estrategias de actuación, como Safe Paths[6], iniciativa desarrollada por el MIT en Estados Unidos. También hay diversas iniciativas en la UE y España, como Corona Madrid, para autoevaluación y poder recibir instrucciones y recomendaciones sobre la COVID-19, o la encuesta para el público en general y los sanitarios que ha lanzado Nuria Oliver, Alta Comisionada para la Estrategia Valenciana para la IA, con el fin de entender cómo se está propagando la COVID-19
Relativo a la identificación de presencia de coronavirus en enfermos, un ejemplo digno de mención es AlphaFold, para la predicción de la estructura 3D de proteínas y que puede ser crucial en la creación de vacunas. De otro lado, en la Universidad de Granada, junto con el Hospital Universitario San Cecilio, han creado un modelo de IA para saber si un paciente tiene coronavirus mediante el análisis por rayos-X de pacientes.
La amenaza de la COVID-19 está haciendo aflorar lo mejor de la humanidad. Si miramos la enorme cantidad de instituciones, equipos de investigación o mecenas que están poniendo ciencia, alma, corazón y financiación para luchar contra la pandemia en todos los rincones del mundo, nos tenemos que sentir orgullosos y emocionados por lo que somos capaces de hacer entre todos. Y la IA está jugando un papel fundamental en ello.